lunes, 5 de marzo de 2012

Pobre anciano. año 1932.


. En aquellos años como no había Seguridad Social  ni había retiro, las personas mayores que ya no podían trabajar ni tenían hijos, ni ninguna clase de hacienda, se encontraban en el peor de los desamparos. La verdad es que en el pajar de mi casa, entre la paja, dormía un anciano que venia al anochecer y en cuanto amanecía se marchaba .El pajar estaba situado encima de la cuadra donde estaban alojadas dos caballerías, y a un lado había una pajera de donde se sacaba la paja para llenar los pesebres. Justo  encima de la pajera había un hueco que comunicaba con el pajar y por donde se llenaba la pajera cuando ésta se quedaba vacía. Por este motivo al pajar tanto mi hermano mayor como yo, tardábamos más de una semana en subir. Si alguna vez subí al amanecer,  me encontraba al anciano durmiendo,  envuelto en una manta y con los pies y medio cuerpo  metidos entre la paja. No pasaba frío porque los animales dan calor y éste subía al pajar. Tampoco le molestarían las ratas porque los tres gatos que teníamos después de cenar nosotros, siempre se iban al pajar a cazarlas. Siempre lo miré con simpatía y él me hablaba con mucho cariño. Yo aquello lo tenia por una situación normal , pero cuando he sido mayor me he dado cuenta del drama que vivía aquel pobre hombre , toda la vida trabajando a jornal , no se casó y por lo tanto se encontraba más sólo que la luna y cuando ya no pudo trabajar le pidió a mi padre permiso para dormir en el pajar y  sé que mi madre si hacía mucho frío le bajaba un puchero de leche caliente y cuantas veces he pensado que si tenia mucha hambre , se bajaría a la cuadra y en la belena que había al lado , estaba el vación de los cutos y casi siempre había comida de sobra, porque ya se habían quedado éstos hartos y alli se quitaría el hambre. Esto lo viví yo  ¡pero cuantos ancianos habrán padecido la misma suerte durante generaciones anteriores en circunstancias parecidas!.  

1 comentario:

miguel 4161 dijo...

QUE TERNURA
ESABA BUESCANDO BIBLIOGRAFIA SOBRE ANCIANOS Y LO ENCONTRE
MIGUEL DE ARGENTINA