Durante más de mil años han estado depositados en unas habitaciones tapiadas del palacio real de Marrakech una gran cantidad de libros de los cronistas árabes referentes a la ocupación musulmana de la Península Ibérica, los principales de la Historia de España de aquellas fechas. Hacia mitad del Siglo pasado fueron abiertas e inventariado su contenido y entre ellos estaba el AL-MUQTABIS, escritos por Ibn Hayyán de Córdoba, cronista Oficial del Califa Abderrahman III, el más poderoso de toda la historia árabe en España . El número V de esta colección se refiere a la campaña de Pamplona y en ella aparece el Desfiladero de los Bascones, donde no había penetrado ejército alguno y como figura primordial Sangüesa, patria del Rey Sancho Garcés I, como Baskunsuh-a (Basconia)corazón del pais de los Bascones . Solamente presentamos los acontecimientos cercanos a Sangüesa.
(XX)-AÑO 312 (9 DE ABRIL 924-28 MARZO 925) CAMPAÑA DE PAMPLONA
En aquel año el califa an-Näsir lanzó contra tierras infieles su campaña llamada de Pamplona, país de los enemigos de Dios, los infieles vascones, adelantando el alarde para esta aceifa con respecto a lo usual , movido por el suceso de los Banu Lubb y los Banu Dï n-Nün en la fortaleza de Viguera , en el límite de la Marca Superior. En efecto, el alarde de esta campaña fue el jueves , 2 de dü l-hiyya del 311, 10 de febrero del calendario solar, partiendo de su alcázar de Córdoba para llevarlo a cabo el sábado, quedando 14 noches de muharram del año 12, 17 de abril solar a los 23 días del alarde. En el alcázar de Córdoba quedó su primogénito y heredero al – Hakam, y de los Visires, Ahmadb.Muhammad b.Hudayr.
En marcha, an-Nasir, tomó el camino de Levante, parando al día de salir en Vélez, donde se demoró dos días para que se le uniesen los soldados y súbditos reclutados en las distintas regiones de las Coras para hacer con él la guerra santa, que fueron llegando allí, y luego partió en dirección a las coras de Tudmïr y Valencia, comenzando por los disidentes y rebeldes de allí: combatió a Lorca donde estaba Abdarrahman b.Waddäh, hombre cruelísimo, en franca rebeldía que se le rindió bajo aman, siendo enviado a Córdoba con su familia, desde allí, fue a Murcia, donde hizo rendirse a Ya¨qüb b. Abï Jälid at-Tüzari, Amir b.Abï Yawsan y otros de los lugares en que se enseñoreaban en rebeldía y acabó con la contienda entré estos dos, llevándose a Ya¨qub en la expedición a Pamplona: en cambio se le resistió Mühammad b.Abdarrahman b.as-Sayj, que se negó a rendirse y partir con él, en la ciudad de Askar de los alfoces de Valencia, cuyas fortalezas hubo de combatir y hollar sus llanos, inflingiéndole daño y emplazando a uno de sus principales caides con nutrida tropa con el encargo de combatirlo y sitiarlo. Enderezó pues las coras de Tudmïr y Valencia, consolidando su sumisión y reparó la situación de la gente de Tortosa recuperando para ellos algunos distritos que les habían sido mermados.
Tras todo esto avanzó a la Marca Superior, con tropas tan numerosas como los guijarros, hasta hacer alto en Alcañiz, en los alfoces de Zaragoza y subir luego desde allí hasta Tudela. Salieron a su encuentro los Tuyibies , señores de Zaragoza y otros, recibiéndole los gobernadores de la Marca con grandes ejércitos y pertrechos completos, con cuyo total penetró en el país infiel de Pamplona que Dios arrase , el sábado , 4 de rahi II (10 julio 924) con la mayor decisión y más firme empeño y seria intención de vengar a Dios y su religión de las profanaciones de los infieles. Su primer alto en aquel país fue en la fortaleza de Calahorra, que su jefe Sancho, a quien Dios maldiga , había evacuado; mandó , pues, destruirla y quemar cuanto en ella había, y de allí se trasladó al lugar conocido como Qantara Alba, en torno a la cual había plazas fuertes, evacuadas por los infieles tan apresuradamente que dejaron en las explanadas bagajes y vituallas, refugiándose algunos de ellos con sus familias e hijos en tres cuevas al borde de un farallón sobre el río, donde los musulmanes subieron prontamente , atacándoles por encima, hasta que Dios les hizo conquistar aquellas cuevas; dieron muerte a los bárbaros, hicieron cautivos a los niños y saquearon las provisiones, lo que fue el primer botín que concedió Dios a los del ejército. Las fortalezas infieles de aquella zona fueron destruidas, no quedando de ellas una piedra derecha.
Tras haber permanecido en aquel campamento un día, an- Nasir se trasladó a la fortaleza de Falces , incendiando sus arrabales y acabando totalmente con sus cosechas y recursos, para luego marchar hacia la fortaleza de Tafalla, entre las más importantes que ellos tenían, donde fueron halladas muchas provisiones y abundantes recursos, todo lo cual saquearon los musulmanes, que se esforzaron en destruir moradas y depredar lugares. De allí partió an-Nasir a Carcastillo , junto al rio Aragón, cuyos cultivos borró y luego se propuso PENETRAR EN EL MISMO CORAZÓN DEL PAIS DE LOS INFIELES , donde se reunían y sentían seguros, para hacerles daño allí mismo , para lo cual se equipó, tomando en la marcha la precaución de cuidar los flancos y mantener las posiciones, recogiendo los extremos y así avanzó por el DESFILADERO DE LOS BASCONES, en perfecta formación el sábado 11 de rahí (17 de Julio de 924)PENETRANDO LOS EJERCITOS EN LUGARES DONDE NUNCA LO HICIERON, quemando fortalezas y destruyendo el país, hasta parar en LA ALDEA (¿)DE SANGÜESA DE LA QUE ERA ORIUNDO EL BARBARO SANCHO, a quien Dios extirpe y cuyos edificios fueron destruidos y quemado todo su contenido. Sigue.
(XX)-AÑO 312 (9 DE ABRIL 924-28 MARZO 925) CAMPAÑA DE PAMPLONA
En aquel año el califa an-Näsir lanzó contra tierras infieles su campaña llamada de Pamplona, país de los enemigos de Dios, los infieles vascones, adelantando el alarde para esta aceifa con respecto a lo usual , movido por el suceso de los Banu Lubb y los Banu Dï n-Nün en la fortaleza de Viguera , en el límite de la Marca Superior. En efecto, el alarde de esta campaña fue el jueves , 2 de dü l-hiyya del 311, 10 de febrero del calendario solar, partiendo de su alcázar de Córdoba para llevarlo a cabo el sábado, quedando 14 noches de muharram del año 12, 17 de abril solar a los 23 días del alarde. En el alcázar de Córdoba quedó su primogénito y heredero al – Hakam, y de los Visires, Ahmadb.Muhammad b.Hudayr.
En marcha, an-Nasir, tomó el camino de Levante, parando al día de salir en Vélez, donde se demoró dos días para que se le uniesen los soldados y súbditos reclutados en las distintas regiones de las Coras para hacer con él la guerra santa, que fueron llegando allí, y luego partió en dirección a las coras de Tudmïr y Valencia, comenzando por los disidentes y rebeldes de allí: combatió a Lorca donde estaba Abdarrahman b.Waddäh, hombre cruelísimo, en franca rebeldía que se le rindió bajo aman, siendo enviado a Córdoba con su familia, desde allí, fue a Murcia, donde hizo rendirse a Ya¨qüb b. Abï Jälid at-Tüzari, Amir b.Abï Yawsan y otros de los lugares en que se enseñoreaban en rebeldía y acabó con la contienda entré estos dos, llevándose a Ya¨qub en la expedición a Pamplona: en cambio se le resistió Mühammad b.Abdarrahman b.as-Sayj, que se negó a rendirse y partir con él, en la ciudad de Askar de los alfoces de Valencia, cuyas fortalezas hubo de combatir y hollar sus llanos, inflingiéndole daño y emplazando a uno de sus principales caides con nutrida tropa con el encargo de combatirlo y sitiarlo. Enderezó pues las coras de Tudmïr y Valencia, consolidando su sumisión y reparó la situación de la gente de Tortosa recuperando para ellos algunos distritos que les habían sido mermados.
Tras todo esto avanzó a la Marca Superior, con tropas tan numerosas como los guijarros, hasta hacer alto en Alcañiz, en los alfoces de Zaragoza y subir luego desde allí hasta Tudela. Salieron a su encuentro los Tuyibies , señores de Zaragoza y otros, recibiéndole los gobernadores de la Marca con grandes ejércitos y pertrechos completos, con cuyo total penetró en el país infiel de Pamplona que Dios arrase , el sábado , 4 de rahi II (10 julio 924) con la mayor decisión y más firme empeño y seria intención de vengar a Dios y su religión de las profanaciones de los infieles. Su primer alto en aquel país fue en la fortaleza de Calahorra, que su jefe Sancho, a quien Dios maldiga , había evacuado; mandó , pues, destruirla y quemar cuanto en ella había, y de allí se trasladó al lugar conocido como Qantara Alba, en torno a la cual había plazas fuertes, evacuadas por los infieles tan apresuradamente que dejaron en las explanadas bagajes y vituallas, refugiándose algunos de ellos con sus familias e hijos en tres cuevas al borde de un farallón sobre el río, donde los musulmanes subieron prontamente , atacándoles por encima, hasta que Dios les hizo conquistar aquellas cuevas; dieron muerte a los bárbaros, hicieron cautivos a los niños y saquearon las provisiones, lo que fue el primer botín que concedió Dios a los del ejército. Las fortalezas infieles de aquella zona fueron destruidas, no quedando de ellas una piedra derecha.
Tras haber permanecido en aquel campamento un día, an- Nasir se trasladó a la fortaleza de Falces , incendiando sus arrabales y acabando totalmente con sus cosechas y recursos, para luego marchar hacia la fortaleza de Tafalla, entre las más importantes que ellos tenían, donde fueron halladas muchas provisiones y abundantes recursos, todo lo cual saquearon los musulmanes, que se esforzaron en destruir moradas y depredar lugares. De allí partió an-Nasir a Carcastillo , junto al rio Aragón, cuyos cultivos borró y luego se propuso PENETRAR EN EL MISMO CORAZÓN DEL PAIS DE LOS INFIELES , donde se reunían y sentían seguros, para hacerles daño allí mismo , para lo cual se equipó, tomando en la marcha la precaución de cuidar los flancos y mantener las posiciones, recogiendo los extremos y así avanzó por el DESFILADERO DE LOS BASCONES, en perfecta formación el sábado 11 de rahí (17 de Julio de 924)PENETRANDO LOS EJERCITOS EN LUGARES DONDE NUNCA LO HICIERON, quemando fortalezas y destruyendo el país, hasta parar en LA ALDEA (¿)DE SANGÜESA DE LA QUE ERA ORIUNDO EL BARBARO SANCHO, a quien Dios extirpe y cuyos edificios fueron destruidos y quemado todo su contenido. Sigue.